Jude Bellingham es duda para el partido del próximo domingo en Cádiz. El inglés sigue recuperándose de la luxación de hombro que sufrió hace 18 días en el partido ante el Rayo Vallecano y que le impidió jugar contra el Sporting de Braga y el Valencia, además de los partidos internacionales con su selección. Sigue entrenándose a medio gas al arrastrar molestias provocadas por la inestabilidad anterior en su hombro izquierdo provocada por una luxación.
Bellingham quiere volver, pero el cuerpo técnico y médico del equipo tienen claro que no arriesgarán si no se encuentra al cien por cien. Aunque se ha cumplido el tiempo de recuperación previsto de dos semanas, el jugador no acaba de recuperarse plenamente, por lo que su participación el domingo está en el aire. El inglés hace parte de los entrenamientos con sus compañeros, pero dedica la otra parte a recuperarse de la lesión con el fin de no dejar secuelas que provoquen una recaída.
BELLINGHAMDEPENDENCIA
El centrocampista británico se convirtió en la referencia ofensiva del equipo cuando Vinicius cayó lesionado a finales de agosto. Sus goles mantuvieron vivo a los blancos ante la falta de delanteros de una plantilla limitada ofensivamente. Bellingham es el máximo goleador de los blancos con 13 dianas que han sido fundamentales. Cuando se lesionó contra el Rayo, Vinicius recogió el testigo en colaboración con Rodrygo. Pero el brasileño se ha vuelto a lesionar y Ancelotti afronta los próximos dos meses y medio del calendario con solo dos delanteros, Rodrygo y Joselu.
A la baja de Vinicius se han sumado las de Tchouameni y Camavinga, dos habituales en las alineaciones de Ancelotti desde que empezó la temporada. El italiano tiene que buscar soluciones a esas dos ausencias en la medular y Bellingham sería una de las opciones para fortalecer el centro del campo si estuviera recuperado. Su baja dejaría a los blancos bajo mínimos ante el Cádiz adonde puede llegar con ocho ausencias. Ancelotti tendría 15 jugadores del primer equipo, 14 de campo, si no recupera a Bellingham, Ceballos y Kepa que salen de lesiones.