Como Hello Kitty con una motosierra en la oficina
El porno favorito de algunas de mis amigas asalariadas no está en Pornhub, sino en la calculadora de despido online. Me faltan dedos para contar a todas las que llevan el cálculo semanal de su finiquito si las echan en ese preciso instante. También están las resignadas, siempre previsoras. Más que el subidón de recibir la indemnización aquí y ahora, se refugian en el cálido abrazo del horizonte sin sobresaltos que vislumbran en la web del simulador de jubilación del Gobierno. Algunos se reirán por su falta de adrenalina, pero son las privilegiadas del reino, las que han podido cotizar con regularidad y todavía acarician la fantasía de la rutina de la jubilada ociosa.