El cambio climático, los conflictos y la desigualdad frenan los avances en la lucha contra la malaria
El cambio climático, los conflictos y las desigualdades en el acceso a la sanidad amenazan con socavar los avances alcanzados en la lucha contra la malaria. Según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre esta enfermedad, publicado este miércoles, entre 2000 y 2023, los esfuerzos globales para controlar el paludismo evitaron 2.200 millones de casos y 12,7 millones de muertes en todo el mundo. Además, 44 países y un territorio han sido declarados “libres de malaria”, Egipto, el último de ellos. Sin embargo, pese a las tendencias “esperanzadoras”, la OMS alerta de un aumento en el número de enfermos: el año pasado se notificaron 263 millones de nuevos casos de malaria en 83 países, 11 millones más que en 2022, y 597.000 muertes, una cifra muy similar a la del año anterior. El 94% de los casos y el 95% de las muertes se concentraron en África.