Finlandia cerrará este sábado otra puerta en el muro que separa cada vez más a Rusia y la Unión Europea. El Gobierno del país nórdico ha anunciado el bloqueo de cuatro de sus nueve pasos fronterizos con su vecino del este, todos ellos en la zona sur, la región donde se concentra casi toda su población. Helsinki ha tomado esta medida tras acusar a Moscú de intentar provocar una crisis migratoria mediante el traslado de personas de otros países sin papeles a su territorio. Este cierre parcial de la frontera implica una dificultad más para el desplazamiento de rusos a la Unión Europea: el veto aéreo del bloque a Rusia por la invasión de Ucrania ha restringido los vuelos solo a quienes pueden permitirse pagar un oneroso billete a través de Turquía u Oriente Próximo.