El coste de mantener el poder adquisitivo de más de diez millones de pensionistas el próximo año será de alrededor de 7.647 millones de euros. Para llegar a esta cantidad, se destinarán unos 6.622 millones a revalorizar las pensiones contributivas del sistema un 3,8%, ya que la ley marca que todas las prestaciones de la Seguridad Social deben subir, como mínimo, lo mismo que aumenten los precios en promedio entre diciembre de 2022 y noviembre de 2023.